LeBron James sonrió triunfalmente. Los Lakers de Los Ángeles consiguieron el primer lugar en la Conferencia del Oeste luego de vencer el lunes a los Jazz de Utah por 116-108. Esta es la primera vez en 10 años que los ‘dorado y púrpura’ terminarán la temporada con el mejor puesto de su zona.
“Desde 2010, ¿verdad?”, le dijo James al diario Los Ángeles The Times. “Dijeron que no podía hacerlo”.
“Voy a disfrutar esto”, añadió el estelar alero, asintiendo con la cabeza mientras sonreía. “Dijeron que no puedo hacerlo”.
La victoria del lunes por la noche marcó el siguiente paso en el plan que comenzó cuando los Lakers firmaron a James en el verano de 2018. Fue la primera superestrella en comprometerse con la franquicia después de años de ofertas fallidas de la agencia libre. Se unió al equipo después de una carrera en la Conferencia del Este que produjo nueve apariciones en las Finales de la NBA y tres campeonatos. El camino no ha sido fácil, han tenido que sobrepasar una serie de obstáculos pero ahora parece que cuentan con lo necesario para alcanzar el objetivo: un 17º campeonato para los Lakers.
Agregaron a Anthony Davis, quizás el mejor hombre grande de la liga, que en su carrera de siete temporadas con Nueva Orleans promedió 23.7 puntos, 10.5 rebotes y 2.4 bloqueos por juego. También añadieron un reparto secundario en el que James y Davis han podido confiar. James mismo ha tenido una temporada que le ha valido votos para el premio de MVP. Y más de 13 meses después de que se construyó el equipo, en el lugar más improbable, una arena donde no se permiten fanáticos en el campus de Walt Disney World, James pudo celebrar un hito.
“Puedo decir que se siente muy bien ser el primer lugar en el Oeste”, dijo James. “Para mí, personalmente”.
Ahora los Lakers se concentrarán en terminar la ronda regular de la mejor manera posible para entrar fuerte a los playoffs y también tendrán la mirada puesta en la lucha por el octavo lugar en la Conferencia del Oeste para analizar a su posible rival en la primera ronda de la postemporada.
“Estamos viendo a Memphis, Pelicans, San Antonio y Portland. Tampoco estamos descartando a Phoenix. Simplemente estamos pendiente de cuál sería nuestro enfrentamiento”.
Mientras hablaba, James esperó a que Davis llegara para poder caminar juntos al autobús del equipo. Es una rutina en la que han caído. Pronto, Davis se unió a él en el pasillo y se alejaron uno al lado del otro. Lo logrado el lunes les permitirá algún tiempo para celebrar antes de avanzar juntos hacia su objetivo de ganar un campeonato.