Los Knicks de Nueva York hicieron uno de los movimientos más grandes de la semana de límite de traspaso, pero en la oficina.
El equipo separó de su cargo al presidente Steve Mills, quien había estado en el mismo desde julio de 2017. En la reorganización, el gerente general Scott Perry se encargará de la presidencia mientras que se mantendrá supervisando las operaciones de baloncesto.
El dueño del equipo, Jim Dolan, dijo en un comunicado: “Steve y yo hemos tomado la decisión de que sería mejor para él dejar su papel como presidente. Agradecemos a Steve por sus muchos años de servicio. a nuestra organización y esperamos continuar nuestra relación con él como parte de nuestro consejo”.
Existe el rumor que el movimiento de Mills se debe a que el propietario Dolan planea apuntar al presidente de los Raptors de Toronto, Masai Ujiri, para supervisar las operaciones de los Knicks, según múltiples informes. Ujiri está bajo contrato hasta la temporada 2020-21.
Mills asumió el cargo de presidente del equipo poco después de que despidieran a Phil Jackson en junio de 2017. Bajo Jackson, los Knicks tuvieron marca de 80-166 con cero apariciones en playoffs entre 2014-17.
Sin embargo, el destino de los Knicks tampoco fue muy diferente en la era Mills. Desde el comienzo de la temporada 2017-18, Nueva York tampoco ha logrado llegar a los playoffs y dejó balance de 46-164 en ese lapso. En esta temporada su marca es de 15-36 y están nuevamente fuera de los playoffs de la Conferencia Este, hasta el momento. Bajó Mills los Knicks tuvieron tres entrenadores diferentes (Jeff Hornacek, David Fizdale, Mike Miller) desde el verano de 2017.